El aceite de oso para el cabello es uno de los tantos oleos que podemos encontrar en el mercado y que tienen como finalidad, entre otras cosas, promover la salud capilar.
Este producto a pesar de no ser tan común como otros aceites es sin duda uno de los más antiguos y que más controversia puede tener actualmente por su origen.
Lo cierto es que el origen de este aceite remonta en siglo XVII, donde nativos americanos que se dedicaban a la caza de los osos, tras matarlos y seleccionar su carne para alimentarse, les surgió la idea de utilizar la grasa que revestía a tal animal para tratar la pérdida del cabello en los hombres, suponiendo que la misma tendría relación con el abundante pelaje que caracteriza a los osos.
Desde entonces comenzaron a utilizar esta grasa animal como ungüento para obtener diversas propiedades y beneficios medicinales y cosméticos.
Fue entonces con el pasar de los años que comenzó a comercializarse en diferentes países. Hoy en día, sigue siendo comercializado y asociando al cuidado capilar gracias a laboratorios que se han dado a la tarea de combinar ingredientes que reúnan las características y propiedades de la fórmula original.
Entre los ingredientes utilizados para tal formulación se encuentran el aceite orgánico de jojoba, aceite de oliva extra virgen, aceite de ricino, aceite de girasol, aceite de almendras, vaselina, colágeno, vitamina E y demás compuestos.
¿Para Qué Sirve El Aceite De Oso Para El Cabello?
Las propiedades que caracterizan este aceite son capaces de aportar estupendos beneficios a la salud capilar entre los que destacan:
- Su efectividad para tratar problemas de calvicie y quiebre del cabello débil.
- Otro de los beneficios del aceite de oso para el cabello es aportarle brillo, sedosidad, fortaleza y resistencia desde las raíces hasta las puntas.
- Evita la resequedad tras tratamientos químicos agresivos.
- Humecta e hidrata el pelo de forma totalmente natural.
- Perfecto para cualquier tipo de cabello, e indiferentemente de la edad de la persona.
- En cuanto al cuero cabelludo; actúa como un perfecto aliado para combatir hongos o la molesta caspa.
- Beneficia también la piel, el vello facial e incluso hay quienes usan el aceite de oso para las cejas.
¿Cómo Se Usa El Aceite De Oso En El Pelo?
La forma de usar y sacarle provecho al aceite de oso es bastante sencilla, existen básicamente dos maneras de hacerlo:
Primero es antes del baño, es decir, antes de lavar el cabello. Para ello, debes tomar una cantidad considerable de aceite y calentarlo un poco, bien sea a baño maría o en el microondas.
Una vez que el aceite haya calentado un poco, comienza a aplicarlo y distribuirlo sobre todo el cabello, comenzando desde el cuero cabelludo hasta llegar a las puntas.
Aplicado el aceite, coloca un gorro de baño y sobre este una toalla caliente, también puedes utilizar un gorro térmico para dar un poco de calor.
Deja que el aceite actué al menos 25 minutos antes de proceder a retirar lavando tu cabello como normalmente lo haces. Esta forma resulta perfecta si tienes problemas de cuero cabelludo.
La segunda manera de aplicar este aceite en el cabello es luego de lavarlo, la forma correcta es tomar un par de gotas entre tus palmas, frotarlas y luego aplicar sobre el cabello.
Lo que conseguirás con ambas formas de aplicar el aceite de oso para el cabello es un brillo increíble, luminosidad y una melena fortalecida, que crecerá rápidamente manteniendo sus puntas en perfecto estado.
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